A diario nos topamos con cifras que pueden parecer inverosímiles en los tiempos en los que vivimos. Y es que en una sociedad supuestamente volcada y totalmente sensibilizada por mitigar la violencia de género, siguen apareciendo datos alarmantes.

Este es el caso recogido por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, desde donde se afirma que cerca del 80 % de las más de mil mujeres asesinadas en España, no presentaron denuncia alguna.

Así se ha reconocido en una reunión recientemente celebrada por esta institución, que fue presidida por el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial y a la que asistieron, entre otros, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo; la ministra de Justicia, Dolores Delgado; el ministerio del Interior, Fernando Grande-Marlaska; y la fiscal general del Estado, María José Segarra; la delegada del Gobierno contra la violencia de Género, Rebeca Palomo; la presidenta del Consejo General de la Abogacía Española, Victoria Ortega; el presidente del Consejo General de los Procuradores de España, Juan Carlos Estévez; y la vocal del órgano de gobierno de los jueces y presidenta del Observatorio, Ángeles Carmona.

El Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, creado en el año 2002 y cuya finalidad principal consiste en abordar el tratamiento de este tipo de violencia desde la Administración de Justicia, está integrado por las siguientes instituciones: el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que ostenta la Presidencia, el Ministerio de Justicia, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, el Ministerio del Interior, la Fiscalía General del Estado, las Comunidades Autónomas con competencias en materia de justicia, a través de turnos rotatorios anuales, el Consejo General de la Abogacía Española y el Consejo General de Procuradores de España.

Desde 2003, este organismo dependiente del Consejo General del Poder Judicial empezó a registrar la estadística. Ahora y una vez superada la terrible cifra de mil víctimas, las instituciones que la integran han analizado la aplicación de las medidas del Pacto de Estado contra la violencia de género y han puesto en común los trabajos realizados para la actualización de datos estadísticos en esta materia.

Asimismo, han querido poner sobre la mesa la importancia de que toda persona sometida a cualquier tipo de maltrato presente denuncia o pida ayuda. Éste y sólo éste, es el paso previo para que las distintas administraciones puedan poner en marcha su maquinaria, especialmente en el ámbito de la protección, la investigación de los hechos y la eventual condena al responsable del maltrato.

En este sentido, y haciendo hincapié en concienciar a las mujeres maltratadas sobre el factor de riesgo que supone su silencio, también se hace un llamamiento al resto de la sociedad sobre la necesidad de poner este tipo de casos en manos de las autoridades competentes.

Sin embargo, en la actualidad, el porcentaje de denuncias presentadas por familiares de las víctimas o terceras personas en general es muy bajo situándose entre un cinco y un siete por ciento.

En lo referente al perfil de las mujeres que recoge la estadística, el Observatorio pone de manifiesto que en torno a un 75 por ciento eran madres. Esta cifra concluye que la maternidad es un factor de alta vulnerabilidad para las mujeres maltratadas. El motivo no es otro que el miedo con el que vive la víctima en caso de denunciar, por las represalias que pueda emprender el maltratador contra sus hijos.

Pero además de este, existen otros valores de vulnerabilidad como son la pobreza, la dependencia económica al maltratador, la dependencia por situación de discapacidad o el embarazo.

En cuanto al ámbito territorial de esta lacra no hay excepción. La violencia machista en España ha estado presente en todas sus provincias con otro dato escalofriante, y es que no hay una sola provincia en la que no se hayan producido al menos dos casos de asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas.

Otra cifra a tener en cuenta es que alrededor de un 70 por ciento de los casos se producen en pueblos o ciudades de menos de 100 000 habitantes. Por ello, desde el Observatorio se recalca la necesidad de redoblar los esfuerzos en el ámbito rural, sin dejar de lado ningún otro.

La sesión concluyó con un unánime mensaje de esperanza que el Observatorio quiere transmitir a las mujeres maltratadas. Bajo el lema, no estáis solas, esta institución recuerda que hay miles de profesionales a su disposición dispuestos a salvar vidas y, por supuesto, infinidad de mecanismos para evitar más muertes. Desde cualquier ámbito, policial, jurídico, sanitario, etcétera, hasta cualquier gesto, una visita a un centro de salud, una llamada al 016, o simplemente una conversación con una persona de confianza, pero nunca el silencio.

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